Quiero morder la manzana, aquella que me aleje de esta mierda de rutina.
Quiero dejar atrás las horas puntas y perder miles de zapatos en el camino.
Estoy harta de esperar tu llegada, pero, ¿y si realmente no estoy esperando nada?
Quiero enamorarme de sapos, bestias e incluso príncipes o princesas que sepan que el amor no tiene género ni violencia de por medio.
Quiero atravesar océanos gritando lo mucho que me amo, porque, ¿quién coño me va a querer más que yo a mí misma?
Porque el amor nunca acabará con un fueron felices y comieron perdices, si no, que acabará con un:
Fueron tan felices que se comieron hasta extasiar.
Comentarios
Publicar un comentario